27 de agosto de 2009

El mundo está herido, herido de muerte

Por: El Hombre Espantapajaros

"Mientras los soldados americanos siguen la sombra de Al qaeda matando e intentando controlar Irak porque es rico en petróleo, las inmobiliarias estatales reciben un severo castigo después de varios años de bonanza que han pasado jugando a especular.

Las grandes empresas estatales siguen monopolizando mercados a nivel internacional y, ya ahora, los bancos son dueños de medio universo. Imagínate dentro de cuarenta años, cuando por el camino millones de ciudadanos pierdan su patrimonio por no poder afrontar sus correspondientes hipotecas.

Se empieza a notar la mayor crisis económica de todos los tiempos y nadie hace absolutamente nada para cambiar las cosas. Los americanos siguen regalando armas de fuego a sus hijos, argumentando ser el mejor modo de sentirse seguro, mientras en África una vida vale menos que un terrón de azúcar. Las farmacéuticas siguen también creando enfermedades para después vender sus medicinas y las religiones insisten en resaltar que todo es cuestión de tener «fe».

Los políticos se creen sus propias mentiras y pierden de vista la realidad que les rodea porque ellos tienen simplemente otra realidad distinta, mucho más cómoda. Mientras tanto el noventa por ciento de la humanidad es utilizada por el diez por ciento restante.

Vivimos en una sociedad egoísta donde los mandatarios intentan no hacer ruido y tener al pueblo silenciosamente controlado. Obviamente, para eso cuentan con la ayuda del sistema, de todas las empresas colaboradoras, las cuales mayoritariamente son controladas y dirigidas por amigos de esos mismos políticos.

¡Qué error fue pensar que esa capacidad de «razonar » que tenemos los seres humanos respecto al resto de los animales era un beneficio! Sinceramente creo que se ha convertido en el peor castigo autoimpuesto.

Desgraciadamente una mayoría sufren las consecuencias de usar «mal» esa herramienta conocida como la «mente». Sin poder controlarla, padecen de pensamiento compulsivo. Atacamos constantemente y repetidamente la naturaleza sólo para alimentar nuestro sistema materialista. Diariamente los medios de comunicación nos recuerdan la importancia de «tener» más que de «ser». Todo por culpa del maldito dinero, de toda la envidia sumada al miedo que controla y dirige nuestras vidas.

Pero llega un día en que la naturaleza se levanta por la mañana enfurecida y herida por nuestro comportamiento, y de un solo plumazo se carga cien mil ciudadanos de Birmania de los más necesitados. Al día siguiente, aún enfadada, hace temblar China entera durante veinticuatro horas seguidas, causando numerosos daños personales a cientos de miles de pobres inocentes. Así de injusta es la vida por culpa del hombre.

Si aprendiéramos todos a respetar la naturaleza, ella nos respetaría a nosotros; pero llevamos cientos de años robándole agua, petróleo, minerales y todos esos millones de árboles que cada año cortamos para fabricar palillos o algo parecido.

No paramos de profundizar en su herida sin conciencia. Qué estúpido parece, visto desde la distancia. Además, nos empeñamos en destruir sistemáticamente lo poco virgen que queda asfaltándolo todo. Cubriendo ríos de puentes de cemento sólo para aumentar una cuenta de resultados o alguna cuenta bancaria.

Desde mi campo de trigo en silencio, puedo escuchar al político de turno replicarme:
«Eso lo hacemos para mejorar las comunicaciones. »

La comunicación es un fenómeno de carácter social que comprende todos los actos mediante los cuales los seres vivos se comunican con sus semejantes para transmitir o intercambiar información. Comunicar significa poner en común e implica compartir, la comunicación se inicia con el surgimiento de la vida en nuestro planeta y su desarrollo ha sido simultáneo
al progreso de la humanidad. Se manifestó primero a través de un lenguaje no verbal.

Todos los días los seres vivos se comunican de diferentes maneras, pero sólo los seres humanos podemos hacerlo racionalmente. Así que creo que los puentes no comunican, sino que simplemente reducen los costes de transporte para que éste mismo sea más competitivo.

Vivimos en una sociedad donde existe una lucha real de egos. Una competitividad desmesurada que sólo se puede entender en el mundo de los deportes. Los que se creen fuertes se alimentan de la energía de los que se creen débiles sin contemplaciones. Lo más triste es que lo hacen sin darse cuenta. Sin ser concientes. Los que se sienten superiores machacan a los débiles porque desgraciadamente todavía existen distintas clases sociales.

También el racismo es parte de otra epidemia que arrastramos de la historia. Igualmente pasa con la pobreza. Por el mismo motivo existe también la violencia doméstica y el machismo.Todavía hoy en día hay hombres que se creen superiores a las mujeres, y lo que es igual de malo es que empieza a haber mujeres que se creen superiores a los hombres.

El ser humano es libre por naturaleza. Deberíamos todos dejar de tener ese espíritu tan posesivo que aflora con el ego. Todos somos seres únicos, indescriptibles e inimitables. No hay un «mejor» sin un «peor», no existe el «bien» sin el «mal». En este mundo de contradicciones, donde existe el «alto» porque hay un «bajo», donde existe el «gordo » porque hay un «flaco», nos empeñamos en comparar a las personas con unos ideales que no representan la verdadera escala de valores de la población.

Es por eso que ya hace muchos años me convertí en un simple espantapájaros que se dedica a observar. Hasta ahora en silencio.

Los glaciares de la Antártida avisan de lo que puede llegar a suceder y la única pregunta que podemos hacernos es si no será ya demasiado tarde. El mundo está herido, herido de muerte. Podemos seguir con los brazos cruzados sin hacer nada para remediarlo, sabiendo que la suerte está echada. Sólo nos queda esperar el momento en que llegue la fecha de caducidad del planeta. Cuando la vida ya no tenga lugar en este mundo. O podemos también empezar una profunda transformación de nosotros mismos, del sistema y, en consecuencia, del planeta.

Desde mi perspectiva de espantapájaros la mayoría de cosas que afectan a los humanos han dejado de preocuparme. No tengo mente ni corazón, ni tan siquiera practico el arte de respirar. No soy nada ni nadie, o lo que es lo mismo en la física cuántica, soy un pequeño «todo».

Podrías estar pensando que es un argumento algo pesimista o catastrofista. Obviamente lo es, debido a la importancia de todo el asunto. Pero dentro de doscientos años, los habitantes de la Tierra, si es que existen, estarán tremendamente agradecidos a nuestra generación. Nos recordarán como los estúpidos salvadores que tardaron años en darse cuenta del mal que estaban haciendo.

Ojalá lo hayamos conseguido. Seremos héroes que mediante la conciencia colectiva
lograron dar un giro de ciento ochenta grados a este enfermo planeta. La esperanza perdurará mientras la Tierra esté viva.

Mientras tanto, conciencia y suerte.

¿Que no hay ninguna solución?

Claro que si."

www.elhombreespantapajaros.com

10 de agosto de 2009

Hubo una vez alguién

¡Es que quisiera poder derramar en letras lo que se me acumula en el lagrimal! . Conjugar verbos, agregar adjetivos, formular preguntas, o crear afirmaciones que me devuelvan aquello que "perdí"...

En realidad, no lo perdí ¿cierto?, no se puede perder algo que no se tuvo.


Hubo una vez alguién

Que caminaba conmigo tomado de la mano
Que me extrañaba antes de despedirnos
Alguién con quien pasé horas charlando sin llegar al aburrimiento
Alguien que pudo ser quien era sin mas ni mas..

Hubo una vez alguién

Que desde sus sueños buscaba mi abrazo
Que me hacía el amor y no solo el sexo
Que le gustaba que mi voz le cantara en noches de luna
Alguien que me hacía reir, y a fuerza de terco a veces llorar

Hubo una vez alguién

Que en sus ojos reconocí el significado de la palabra amor
Alguien que tambien lo reconoció en los mios
Alguien que fué mi compañero de sueños
Alguien que estaba dispuesto a intentarlo.

Habrá una vez alguien

Que dará por hecho que siempre voy a estar allí,
Que dara por hecho que siempre él va a estar allí.

Habrá una vez alguien

Que no tendrá que perderme
para darse cuenta de que me ha encontrado.

7 de agosto de 2009

Poema XX


Puedo escribir los versos más tristes esta noche

Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,
y tiritan azules, los astros a lo lejos;
el viento de la noche gira en el cielo y canta"

Puedo escribir los versos más tristes esta noche:
Yo la quise, y a veces, ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos,
la besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería,
¡Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos!

Puedo escribir los versos más tristes esta noche,
Pensar que no la tengo, sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella,
y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

¡Qué importa que mi amor no pudiera guardarla!
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo, a lo lejos alguien canta, a lo lejos...
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca,
mi corazón la busca, y ella no está conmigo...

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles...

Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise...
Mi voz buscaba al viento para tocar su oído...

De otro, será de otro, como antes de mis besos
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero... tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

Pablo Neruda

1 de agosto de 2009

Quiero...


Una lagrima de nuevo en mi ser...no es una novedad...ellas por dentro, van formando un caudal de tristeza que me apaga...poco a poco.

¿Por que sufro? eso aun no lo sé, aun no lo comprendo. Y no se si algún día aprenderé que debo tomar "sólo" lo que las personas quieren dar en su paso por mi vida.

La verdad, aun cuando soy emotiva y melancólica hasta el asco, al punto de enviciarme con mi propia tristeza, y llegar reconocer una y otra vez ese sentimiento de soledad como unico y propio, aún así, quiero olvidar... quiero meter todo los recuerdos en una caja y guardarlos por ahì donde nadie los encuentre, quiero deshacerme de esta oscura niebla que me oprime el alma, y que me hace respirar con dificultad, quiero dejar de sentir frio en mis días y noches, frío que cala, los huesos, las carnes y el alma...

Por eso aqui estoy, y aqui sigo, me pongo una careta si es necesario...a fuerza de obligarme como si diviendome en niña y adulta pudiera combatir contra eso que llaman amor.

Y ahora que estoy vacia, solo debo dejar que la vida me llene de todo lo que te dí...porque lo que se ha entregado con el alma, y el corazón el universo lo compesará al doble.